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Cita de: Erik en Septiembre 18, 2014, 09:10:21 pmLa gente que entro, ¿Tenia intencion de robar?Perdón, confusión mía, nadie INTENTA ENTRAR en la casa, hay alguien dentro de la casa. Por mi fail, os diré esta parte, el hombre estaba en su casa.
La gente que entro, ¿Tenia intencion de robar?
A ver si atino con esta, creo k puedo comprar vocal...XD¿Los k golpean el coche son niños, o gamberros?
¿La otra persona dentro de la casa es su mujer?
¿El hombre estaba haciendo ejercicio?¿Hay algún tipo de accidente de la naturaleza?
Qué caso más raro xD¿El coche está en un garaje?
Pues voy a intentar resolver porque hay bastantes pistas en todas esas respuestas, pero no entiendo qué tienen que ver los 10,5km si dices que la cifra sí importa.El hombre está en su casa haciendo ejercicio en su cinta de correr. Habiendo recorrido 10,5km, el coche clásico está en perfecto estado.Sigue corriendo. Oye un golpe en la parte trasera (del coche) pero no le da importancia asi que no para de correr.Oye un segundo golpe. Para de correr, baja de la cinta, abre la puerta que da a la calle, va a la parte delantera de la casa, donde tiene aparcado el coche, y ve que unos gamberros le han destrozado el coche.Se caga en su p*** madre.Fin
Enhorabuena Rase , veo k te me adelantaste, pero bueno ahora ya la tengo escrita asi k la voy a poner igual k me hace ilu Caso segun Erikfrost: (click to show/hide)El señor Howard Jefferson Simpson de 38 años de edad, con un perimetro de cintura a la altura del busto de Scarlett johansson en los globos de oro del 2010, y una calvicie terminal k amenaza con ser total en tan solo un par de años, se levanta torpemente después de un terrible dia de resaca, con cada centimetro del cuerpo dolorido y magullado.Se dispone a atacar la nevera cuando de súbito se golpea con un monopatin rojo, para terminar tropezando de bruces con una motosierra de la marca Steel.Su casa es un desastre desde k su mujer, Margarina Leblanc, le hubiese dejado por imposible hacia tan solo unas semanas tras no aguantar el ultimo de sus estúpidos caprichos.Howie nunca habia sido un tio de muchas luces, pero aun así, amaba a su esposa con una ferviente lealtad k pocos hubiesen podido aventurar, y muchos menos igualar.EL golpe le provocó un calambre horroroso k le paralizó toda la pierna desde la punta del dedo gordo hasta la base de la espalda, en los riñones. Después de dejarse caer al suelo y hacerse un ovillo, al fin consigue estirar la extremidad aliviando asi su dolor.Viéndose en tan lamentable y denigrante posición, el bueno de Howie no puede por mas k esbozar una leve sonrisa ,solo para un segundo después ceder a un llanto desconsolado.Su vida es una mierda, una mierda de 3 pares de cojones, su mujer lo ha dejado, su salud es lamentable, (en su ultima visita al medico, le habían prescrito un galopante caso de Diabetes en un estado avanzado, y el medico le había poco menos k amenazado con una especie de ultimatum, una amenaza velada de muerte, si no cambiaba radicalmente su modo de vida, empezando por su alimentación y sus hábitos sedentarios.Estando allí tumbado de perfil, encogido, entre un monton de mierda, con dolores por todo su mil veces maldito cuerpo, y empapado en lagrimas, el bueno d Howie vio una luz al final del tunel, una debil pero calida luz.Todo aquello era cierto, pero Howie todavía tenia algo por lo k merecia la pena seguir viviendo.Se enjugó las lagrimas, se levanto a duras penas y deshecho la idea de desayunar para dirigirse al salón. Por el camino se desprendió de la camisa con la k había dormido. En ella todavía se dejaban ver las marcas de la cerveza y algun k otro pegote d salsa, amen de lo k parecía ser un trozo de chorizo pegado en uno de los laterales...Realizo un par de fuertes inspiraciones, y se subió a la maquina de Step con una determinación encomiable.Efectivamente aun le quedaba algo por lo k vivir. l otro amor de su vida, su amante incondicional, Lucille.La elegante Lucille, la hermosisima Lucille.Ella, había sido la causa de k su adorada Margarina lo dejase. Por supuesto, el no podía comprenderlo, en primer lugar pork el la seguia queriendo, de hecho las queria a las 2, era algo natural para el.EL no lo habia pedido, le hubiese gustado no querer a las 2, sobre todo si eso significaba perder a Margarina, pero eso era lo k sentía su corazón, y el no podia luchar contra lo k sentia. Si lo hacia, solo las estaria engañando, de otro modo, se estaría engañando a si mismo. Desde luego no era su culpa, el asi lo creia, y maldecía a Dios por haber permitido nacer en el aquel amor incondicional por las 2.Por otra parte Lucille era muy diferente a Margarine, tan callada, sumisa, elegante, siempre escuchaba lo k el tenia k decir.Y cuando el la acariciaba con dulzura, ohhh!! , entonces ella gemia amigos, y k Dios me perdone pero lo hacia de una manera k ni Margarina ni niguna otra mujer en el mundo jamas hhubiese podido igualar. k maravillosa y dulce era su voz!!, Howie hubiese matado por oirla una vez mas, y de hecho a punto habia estado de hacerlo unas noches atras ,cuando un par de Chicos insultantemente mas jovenes k ella, la habian estado rondando, provocandola y gritandole palabras impropias de una delicada criatura como Lucille. Que podrian saber ellos tan jovenes e inexpertos de todas las virtudes k ella atesoraba?El la habia visitado todos los dias desde aquel, el dia en k la vio por primera vez.Ella vivia no muy lejos de su casa, y los amplios ventanales de su dormitorio, siempre abiertos, permitian k el se maravillase contemplando su belleza todas las mañanas.Al 5 dia, finalmente se animo, y decidio presentarse , asi k despues de pedir permiso al patron de la casa, este le concedio llevarsela de paseo. Aquel fue el "2ndo mejor dia de su vida", solo despues del dia en k conocio a margarina.Tras conocer las condiciones k su tutor pedia para el k quisiese aspirar a la mano de su pequeña, Howie se desvivió, ahorrando cada penique k conseguia en su malpagado trabajo como encargado de seguridad de una planta de residuos.Todo ello con el consiguiente enfado de su esposa. Howie era como un libro abierto para ella, y Margerina sabia k cada céntimo k el le privaba a ella , estaba destinado a su amante.En mitad de su ejercicio matutino, Howie escucho un pequeño golpe en el porche trasero, no parecio muy fuerte, y como ya le faltaba el aliento, (a pesar de k apenas llevaba poco mas de la mitad de los 12 kmtrs k le habia prescrito el doctor Hubert) No le dio importancia. Asi k alargo la mano hasta el estante y aspiró 2 profundas bocanadas de su inhalador de rescate.Acto seguido siguó con su ejercicio.No podia dejar de pensar en Margarina, pero a cada segundo su mente se desviaba una y otra vez a lucille, asi de una a otra, en una fiebre enfermiza, paranoica. Solo unos pasos mas y podría volver a ver a su querida amante, eso de seguro lo tranquilizara por un tiempo, pues ella era su droga, como lo era la heroína para un Yonki.Una droga k lo habi apartado de todo cuanto amaba, pero aun asi una droga k no estaba dispuesto a dejar.En esas estaba cuando oyo otro golpe, esta vez en la parte de atras casi desde el jardin, este golpe fue mas fuerte, y la posicion del eco, lo alarmó mucho mas k el anterior, de modo k a a pesar de llevar unicamente 10,5 kms recorridos d los 12 k le habia prescrito el dr, se avalanzó desbocado hacia la puerta k conducía al aparcamientoAbrió la puerta de un golpe todavía sofocado y con el sudor chorreando, grasiento a traves de las lorzas de su abdomen y su barriga, sudor k ya habian dejado un profundo surco de humedad en sus calzones amarillos gastados por el uso.Cuando por fin pudo enfocar la vista no podia creer lo k estaba viendo, su preciosa, elegante y siempre comprensiva Lucille, yacia alli, en medio de la entrada del garaje, inmovil, deformada, desfigurada, vejada, ultrajada, y con los ojos rojos anegados en su propia sangre.Sangre descarnada de su cuerpo por culpa de unas piedras indignas, unas piedras k habian lanzado los mismos chicos k 2 semanas antes habian ido a cortejarla frente a su casa.Aquellos k la habian piropeado, y vejado con aquel lenguaje soez, los mismos k habian hecho ademan de tocarla, y los mismos a los k en un atake de rabia, habia estado a punto de matar... y a los k solo el temple y efecto balsamico de la mirada de su mujer margarina habia salvado de una muerte segura en aquella ocasion,...algo de lo k ahora Howie se arrepentia profundamente .Lo ultimo k recuerda es haber proferido un grito de rabia y de locura...despues solo una densa niebla, sangre, y sus manos ensangrentadas mientras sujetaba una motosierra de la marca Steel...ahh si , y una gorra empapada sobre un patinete azul. The end PD: Sego el dinero es lo k le costo comprar a Lucille EDit: arreglados algunos errores ortograficos, no todos, solo las erratas mas chungas
En serio, abuelete, tus historias son TOP jjajajaajajajaja. Me parto la caja cada vez que las leo. Eres el puto jefe, pero sigue ganando Rase A la tarde actualizaré esto pipol
La madre que te paró Lucille! Aguanta, Lucille!